Reseña: "Café Punta del Cielo"

El Café Punta del Cielo es una cadena de café bastante conocida, no sólo por nuestra ciudad, sino por muchos otros lugares a lo largo y ancho de todo México, y aunque se pudiese tener un punto de vista no tan favorable por el hecho de ser una cadena grande con un montón de franquicias, lo cierto es que la percepción te cambia hasta el momento en que entras y pruebas sus distintas opciones de bebidas.

El día que decidimos acudir a éste café, llegamos al lugar con un poco de recelo, pues siempre se ha tenido cierta mala fama con la calidad de las grandes franquicias dedicadas a los alimentos y bebidas, debido a que se tiende a pensar que la industrialización y expansión afecta a la calidad del servicio al ser por lo regular tiendas enfocadas a vender, sin prestar en muchas ocasiones, atenciones como cafés locales suelen hacer.

Sin embargo, desde el momento en que entramos se nos atendió de manera bastante atenta por parte del mesero en turno, el cual era bastante amable y tenía muy buen tacto con el cliente, y sobre todo, nos llamó la atención de que se preocupa por conocer el producto que en su lugar de trabajo se vende, pues nos explicó detalladamente de dónde traen el café, el tipo de tostado que suelen utilizar dependiendo la mezcla a elegir, e incluso nos hizo la observación de qué tipo de mezcla se ajusta más a nuestro paladar, pues se tienen opciones de sabor para todos los gustos, desde lo suave hasta lo amargo.

Posterior a eso, ordenamos 2 capuccinos y un espresso, para lo cual nos fijamos que el tiempo entre la orden y la entrega de la bebida es bastante rápido, aún y cuando tenían el local completamente lleno.

Una de las cosas que más destaca de las bebidas preparadas con café como nuestros capuccinos, es que se tiene la opción de elegir la mezcla que más se ajuste a los gustos personales, existen 4 tipos de ellas, la "M1", "M2", "M3" y "M4", cada una conformada por café de chiapas, oaxaca y veracruz, con un sabor y aroma bastante diferenciado entre una y otra, entre ellas se encuentran toques más fuertes y suaves dependiendo de la que se opte por elegir.

Todas las mezclas están a la vista del público y está permitido abrir cada recipiente para percibir los aromas, color del grano, y asimismo tienen una tarjeta frente a las vasijas que explica en qué consiste la mezcla.

Absolutamente todas tienen un olor muy agradable, y en lo que respecta al sabor podemos opinar sobre la "M4" y M3", la primera fue la base de nuestros capuccinos, los cuales tenían un sabor, en efecto, un tanto más fuerte, notable influencia del tostado utilizado en el grano y la variedad robusta del café.

La "M3" la degustamos en un espresso muy bien extraído, que contaba con un aroma impecable y una crema uniforme que pasó "la prueba de la cuchara", ambos tipos de bebida fueron servidos en sus tazas personalizadas de cerámica y vidrio, muy bonitas en su diseño; destaca también que las bebidas (de las cuales existe una gran variedad, desde espressos fríos hasta tisanas y smothies, y diversas opciones más) se ofrecen en su mayoría en 3 tamaños a elegir y su precio, contrario a lo que pudiera pensarse, no es tan exorbitante como en otras cadenas grandes, sino que se ajusta a un precio un tanto promedio para un negocio con esa clase de alcance.

Respecto del lugar, al entrar, la clientela se da cuenta de que el café se conecta con las instalaciones del hostal "la monja", lo cual otorga un aire distinto al entrar a la sección de mesas que comparten ambas instalaciones, sin embargo nos encontramos con 2 secciones más que la gente puede elegir, la primera se encuentra al aire libre justo frente a la bella catedral de la ciudad, y la segunda, frente a la barra de bebidas (cafeína bar), la cual cuenta con asientos muy cómodos, cuadros decorativos alusivos al café en las paredes, y con una estantería llena de productos que la cadena ofrece, que van desde termos, hasta cápsulas de café para máquinas tipo nespresso.

Cabe señalar que el lugar resulta tan cómodo y con un ambiente excelente, que inclusive diversos grupos (como grupos de tejido) se reúnen semanalmente en él a convivir.

Sin más que agregar, concluimos invitando a la gente a que acuda a ésta sucursal de uno de los cafés más conocidos del país, para que vivan la experiencia por sí mismos, pues como les comentamos a lo largo del artículo, más que ser una cadena enfocada en vender, Punta del Cielo es una empresa mexicana que a pesar de su expansión, busca que el café sea respetado y amado por cuantas personas puedan acercar a ésta excelente y deliciosa bebida.

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